Día ➊❺
“Ora en tus temores y ansiedades”
La voluntad de Dios no es que vivas en ansiedad, ni es su voluntad que enfrentes cada día la vida con miedo e inquietud. Él te creo para mucho más que una vida de angustia que te robe el aliento todos los días. Cuando te encuentres en esos momentos donde no disfrutas ni de la luz del sol, hay alguien que siempre está a tu lado y te dice: “Porque yo Jehová soy tu Dios quien te sostiene de tu mano derecha y te dice no temas yo te ayudo” (Isaías 41:13). Qué lindo es saber que ante cualquier situación que estamos atravesando contamos con alguien poderoso que nunca nos va a dejar de su mano.
De hecho, Isaías da una gran promesa para confiar en Dios y no tener temor a lo que es su voluntad y lo que implica hacerla. La Biblia dice;
“No temas porque yo estoy contigo, no desmayes porque yo soy tu Dios que te esfuerzo siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”. (Isaías 41:10).
Estas promesas que nos ha dejado Dios es una esperanza extraordinaria para vivirla. Dios nos dice que no estamos solos, que siempre estará a nuestro lado sosteniéndonos y ayudándonos a vivir una vida llena de gozo, paz y amor. También, Dios nos dice que no hay afanarse por nada, antes bien qué vengamos delante de su presencia con toda oración y ruego a contarle todas nuestras inquietudes y nuestras preocupaciones. Así que, dile al Señor cómo te sientes, derrámate tu corazón delante de su presencia, cuéntale todo lo que te inquieta, de tal manera que Dios sea el primero a quién tu acudes. Dios es el dueño de tu vida, él te formo, te conoce mejor que nadie y te dice ven a mí, descansa en mi presencia. Dios sabe que en este mundo tendremos aflicciones, pero promete estar con nosotros ahora y siempre.
No podemos controlar el mundo, pero sí podemos confiárselo a Dios. De hecho, el controla todo lo que vemos y aquello que no podemos ver. Su paz está al alcance, no por falta de problemas, sino debido a la presencia de un Dios soberano. La próxima vez qué le temas al futuro alégrate en la soberanía del Señor. Alégrate en lo que ha hecho en ti y para ti. Alégrate porque Dios puede hacer lo que tú eres incapaz de hacer. Llena tu mente con pensamientos de Dios. La Biblia dice: “Bendito el hombre que confía en el Señor y pone en La su confianza. Será como árbol plantado junto al agua que tiene sus raíces hacia las corrientes; no teme que llegue el calor y sus hojas están siempre verdes en época de sequía, no se angustia y nunca deja de dar fruto”. (Jeremías 17:78 NVP).